Se puede demostrar la inexistencia de Dios.
Pero primero:
El ser humano nace con un desconocimiento absoluto del mundo. Una persona que nace en el Sahara conoce su entorno de arena y dunas, y una persona que nace en la selva conoce el entorno de los animales y de los árboles, pero no conocen la existencia de un mar salado. Que creyeran en él sería erróneo ya que si creen en un mar salado sin haberlo visto, pueden creer en un mar azucarado, de plomo fundido o de mierda. Solo sabrán que existe cuando perciban de algún modo dicho mar, o cuando alguien que merezca de confianza lo haya visto, y asimilándolo de forma provisional, ya que los testimonios no siempre son acertados y debemos estar dispuestos en todo momento a modificar nuestra concepción de la realidad, pero siempre en base a percepciones, pruebas.
Vamos ampliando esta percepción a lo largo de los años, pero también lo va haciendo nuestra civilización a lo largo de generaciones. Vamos sabiendo que es cierto gracias a la ciencia. No podemos dar nada por sentado porque pasaríamos a la paradoja del mar.
Parece claro que estamos obligados a restringir nuestra realidad sólo a lo que percibimos como individuos o como civilización.
Sin embargo el ser humano da por ciertas algunas "posibles realidades" que no ha percibido de algún otro. Un claro ejemplo es la creencia de la existencia de Dios como ser voluntario, consciente y todopoderoso.
No podemos dar por sentada esta existencia, si lo hiciéramos seriamos capaces de dar por sentada la existencia de uno, dos, tres o infinitos dioses, los duendes, los gnomos, el monstruo espagueti volador, el coco, la bruja de debajo de mi cama, dora la exploradora...
Los creyentes han elegido a Dios de entre todas las cosas que podrían existir, pero que no han sido percibidas de ningún modo.
A partir de ahora pasaremos a llamar SUPERCONJUNTO a todas esas cosas que no se han demostrado.
Dentro del SUPERCONJUNTO están incluidos los 2 conjuntos siguientes:
-Cosas que no existen (luego no se han demostrado)
-Cosas que existen (pero no se han demostrado)
Las "cosas que no existen" es un conjunto infinito (creo que esto es evidente).
Las "cosas que existen" es un conjunto finito (también evidente).
Las "cosas que existen" es un conjunto finito (también evidente).
Estos son dos axiomas sobre los que se edifica la argumentación. Si alguno no fuera cierto, el razonamiento perdería todo su fundamento.
Los creyentes han elegido el elemento "Dios" de entre todos los elementos del SUPERCONJUNTO, con la esperanza de que esté incluido dentro del subconjunto “cosas que existen" y por tanto fuera del subconjunto "cosas que no existen".
Resumiendo, han escogido un elemento de un conjunto formado por 2 subconjuntos: uno finito y otro infinito.
¿Qué probabilidades hay de que el elemento escogido esté dentro del subconjunto infinito?
Según la teoría de probabilidades, es fácilmente demostrable que el elemento escogido pertenecerá al conjunto infinito con un 100% de probabilidad.
Según la teoría de probabilidades, es fácilmente demostrable que el elemento escogido pertenecerá al conjunto infinito con un 100% de probabilidad.
Por tanto, existe un 0% de probabilidades de que "Dios" pertenezca al conjunto "cosas que existen". Es decir, una persona que afirma que "Dios existe", se equivoca con toda probabilidad.
Matemáticamente, Dios no existe.
Este ensayo no trata de demostrar la inexistencia de Dios, sino la inexistencia de cualquier cosa elegida de forma totalmente aleatoria, fruto "puro" de nuestra imaginación. Lo que demuestra es que al dar por existente algo, debe hacerse en base a algún indicio o prueba. De lo contrario se tratará de una elección al azar entre cosas existentes y cosas inexistentes, y, si la elección es totalmente aleatoria (y este es el 3er axioma), con toda seguridad pertenecerá al conjunto de cosas que no existen.
El creyente negará (entre otras muchas cosas) la veracidad de este 3er axioma, afirmando que la elección del elemento Dios tiene algún fundamento. Desde el punto de vista del autor, no existe tal fundamento, es una elección totalmente arbitraria de un producto de la imaginación, y por tanto pertenece con toda probabilidad al "conjunto de las cosas que no existen".
En todo caso, este artículo no debe interpretarse como una demostración pretenciosa de la inexistencia de Dios, sino como un artículo curioso que ayuda a ver el tema desde un punto de vista distinto y nuevo, que intenta trasladar la discusión sobre la existencia de Dios a la discusión sobre la veracidad de los axiomas. Si tales axiomas se consideran ciertos, el razona miento es impecable.
No hay comentarios:
Publicar un comentario